En 1992 Guns N' Roses llegó en medio de escándalos y polémicas a Buenos Aires, Argentina, para ofrecer dos conciertos en la que fue su primera gira por latinoamerica. Ciertos rumores publicados por la prensa más sensacionalista del país acusaban directamente a Axl Rose de haber quemado una bandera argentina durante un concierto en París. Los rumores llegaron hasta tal punto que también se dijo que Axl había declarado que después del concierto en Argentina quemaría sus botas porque odiaba ese país. Ante el revuelo que se estaba generando, al grupo no le quedó más remedio que desmentir esas acusaciones. El propio Axl Rose colocó, en una ventana del hotel en el que se hospedaba el grupo, una bandera americana junto a una argentina como símbolo de amistad, pero este gesto de poco sirvió. Los políticos dejaron de lado todos sus asuntos para ocuparse de aquellos "forajidos del rock" que habían insultado a su país, y grupos nacionalistas de extrema derecha comenzaron hacer presencia en la puerta del hotel para agredir a todo aquel que defendiera a los Guns N' Roses. Temiendo lo peor, se extremaron las medidas de seguridad para el concierto. Axl Rose dio una entrevista exclusiva para pedir que no creyeran esos rumores y, sobre todo, que no atacaran a sus fans.
Tras aquellas declaraciones el miedo se apoderó de los argentinos. Muchos padres de adolescentes prohibieron a sus hijos acudir al concierto e incluso acercarse al hotel o al estadio River Plate donde se iba a celebrar el show. Cynthia Tallarico, de 16 años y gran fan de Guns N' Roses, le prometió a su padre que no se acercaría al hotel donde se hospedaban los Guns N' Roses si le compraba unas entradas para el concierto. Su padre accedió, pero Cynthia no cumplió su promesa. Se escapó del colegio, se fue al hotel y allí las cámaras de televisión la entrevistaron. Cuando su padre la vio en la televisión entró en cólera y, tras una fuerte discusión, le prohibió ir al concierto. Desesperada, Cynthia cogió un revólver de su padre, se encerró en su habitación, y allí puso fin a su vida disparándose en la cabeza. Unas horas más tarde su padre la encontró muerta y, al no poder soportarlo, con el mismo revólver también se quitó la vida. Más de 45.000 personas, ajenas a lo que había sucedido, asistieron esa noche al concierto de los Guns N' Roses que se desarrolló con normalidad sin apenas incidentes. Al día siguiente saltaba a las portadas de los periódicos y sorprendía al mundo entero el trágico final Cynthia Tallarico y su padre: "Una joven de 16 años se suicida porque su padre no le dejó ir al concierto de los Guns N' Roses".
Tras aquellas declaraciones el miedo se apoderó de los argentinos. Muchos padres de adolescentes prohibieron a sus hijos acudir al concierto e incluso acercarse al hotel o al estadio River Plate donde se iba a celebrar el show. Cynthia Tallarico, de 16 años y gran fan de Guns N' Roses, le prometió a su padre que no se acercaría al hotel donde se hospedaban los Guns N' Roses si le compraba unas entradas para el concierto. Su padre accedió, pero Cynthia no cumplió su promesa. Se escapó del colegio, se fue al hotel y allí las cámaras de televisión la entrevistaron. Cuando su padre la vio en la televisión entró en cólera y, tras una fuerte discusión, le prohibió ir al concierto. Desesperada, Cynthia cogió un revólver de su padre, se encerró en su habitación, y allí puso fin a su vida disparándose en la cabeza. Unas horas más tarde su padre la encontró muerta y, al no poder soportarlo, con el mismo revólver también se quitó la vida. Más de 45.000 personas, ajenas a lo que había sucedido, asistieron esa noche al concierto de los Guns N' Roses que se desarrolló con normalidad sin apenas incidentes. Al día siguiente saltaba a las portadas de los periódicos y sorprendía al mundo entero el trágico final Cynthia Tallarico y su padre: "Una joven de 16 años se suicida porque su padre no le dejó ir al concierto de los Guns N' Roses".