El 21 de octubre de 2003 el cadáver del cantante estadounidense Elliott Smith apareció en su apartamento de Los Ángeles. Tenía 34 años y una carrera prometedora por delante. Sin embargo, su vida personal se desmoronaba. El cuerpo de Smith presentaba dos puñaladas en el pecho, aparentemente autoinflingidas. Según parece, su novia Jennifer Chiba se encontraba encerrada en el cuarto de baño desde dónde mantenía una discusión con Elliott. Tras oír un grito, salió y encontró al cantante con un cuchillo clavado en el corazón. Le quitó el cuchillo, avisó a la policía y se desmayó. Todo apuntaba al suicidio, sin embargo, las circunstancias de la muerte nunca se esclarecieron del todo, tal como atestiguaron las investigaciones policiales y el informe de la autopsia. El cantante atravesaba una profunda depresión fruto de su adicción al alcohol. En el momento su muerte, trabajaba en su nuevo álbum, "From a Basement on the Hill", que vio la luz un año después.