A Maureen Cox, a la edad de 14 años y como a muchas otras muchachas de Liverpool de la época, le interesaba saber todo acerca del nuevo sonido Mersey. Ella estaba particularmente interesada en una banda: Los Beatles, quienes regularmente actuaban en el Cavern Club, a la que Cox iba con mucha frecuencia. Allí conoció a su futuro novio, John Brynne, del grupo de Rory Storm and The Hurricanes, una banda en la cual también había estado Ringo Starr en la batería. Maureen y el batería se conocieron y fueron solamente amigos, ya que Ringo estaba comprometido para ese entonces con Geraldine McGovern. Para finales de 1961 Ringo y Gerry se separaron poniendo punto final a sus compromisos. En 1962 Johnny y Maureen también decidieron romper. Desde ese momento Maureen puso todo su empeño en conquistar a Ringo Starr, sin embargo, fue Paul McCartney el primer Beatle que Cox besó. Una noche, una amiga la retó a que no se atrevería a pararse a la salida de los camerinos y besar a Paul; pero como Maureen era muy tenaz, lo hizo haciendo que su amiga se enfureciera y se fuera. Entretanto, Cox esperaba a que Ringo saliera ya que a ella le parecía que él era el mejor. Cuando por fin lo vio, también se le tiró encima y lo besó como mejor pudo. Un par de semanas más tarde vio a Ringo dirigiéndose a su coche. Maureen corrió hacia él solicitándole un autógrafo y felicitándole por su unión a Los Beatles. Justo cuando se estaba yendo, Maureen copió en un papel el número de la la matrícula del automóvil recordándola hasta el día de su muerte. Poco después, Ringo la vio en la fila para entrar en el Cavern Club cuando él se dirigía al mismo lugar para actuar con Los Beatles. Se le acercó para conversar un rato con ella y le preguntó si quería ir a bailar más tarde.
Después de bailar, Ringo le preguntó a Maureen si quería salir con él, ella estuvo de acuerdo pero le dijo que tenía que estar en casa a medianoche, como toda una cenicienta. Comenzaron a salir juntos regularmente y decidieron mantener su relación en secreto para evitar el enfado de las fans, pero de igual forma ellas lo descubrieron. Maureen siguió yendo al Cavern Club a ver las actuaciones de Los Beatles, pero cada vez se fue tornando más y más peligroso para ella ir a ese lugar. Así lo recordaba la propia Maureen, en 1967: "Las muchachas solían esperar alrededor del Cavern Club durante casi todo el día, sólo para conseguir poder verlos de cerca. Ellos solían tocar un rato en la sesión del mediodía, y luego las chicas se quedaban afuera toda la tarde haciendo cola para poder entrar nuevamente por la noche. Ringo y yo una vez pasamos por ahí cerca de la medianoche y ellas ya estaban haciendo cola para el día siguiente. El objetivo era lograr alcanzar las filas más próximas a la tarima y así poder ver a Los Beatles bien de cerca. Nunca hice cola hasta 2 ó 3 horas antes de que el club abriera. Me daba miedo. Las mujeres que estaban en la cola se peleaban entre sí. Cuando las puertas se abrían las que estaban primeras entraban como un rayo para evitar ser empujadas y pisoteadas por las que venían atrás. Entraban con los rulos puestos para ver a los primeros grupos, pero, cuando se acercaba la hora en la que saldrían Los Beatles, iban en grupos de 4 a los baños para cambiarse y arreglarse de pies a cabeza. Así que cuando Los Beatles salían a escena, las chicas lucían como si acabaran de llegar, obviamente se morían por que alguno se fijara en ellas y así conseguir conocer de cerca por lo menos a uno de ellos. Era realmente terrible la locura causada por ellos, los gritos y el estado de excitación que Los Beatles generaban era indescriptible".
Cierto día, cuando Maureen esperaba a Ringo dentro de su automóvil, una chica se le acercó y le preguntó si era la novia de Ringo. Maureen lo negó, pero aquella empezó a gritarle a que saliera del coche a pelear o de lo contrario le rompería la cara. Maureen inmediatamente subió la ventanilla, temiendo por su vida. La vida de Cox estuvo en riesgo una vez que las fans se enteraron de que estaba saliendo con Ringo. En una ocasión casi la matan y regularmente era golpeada por las muchachas. En septiembre de 1963 Ringo invitó a Maureen a unas vacaciones en Grecia junto a Paul McCartney y su novia Jane Asher durante tres semanas. Maureen se fue sin el permiso de sus padres, ya que tenía miedo de que estos no la dejaran ir, pero de todas formas se enteraron más tarde cuando leyeron en los tabloides británicos donde estaba su hija. El padre de Maureen, Joe Cox declaró en 1964: "Realmente no fue una sorpresa para mi esposa y para mí enterarnos de que ella estaba del otro lado del mundo. No había ninguna diferencia entre si le dábamos o no permiso porque ella se iba igual. Maureen era una muchacha muy sensible e independiente y se sabía cuidar por sí sola". Aunque no era muy querida por las fans, Cox respondía las cartas que recibía Ringo Starr, sobre todo las de sus admiradoras femeninas. Los familiares de las fans también escribían agradeciendo la gentileza que tenían al responder las cartas de sus hijas. Su noviazgo finalizaría por un tiempo en 1964, justo desde que Los Beatles comenzaron a hacerse cada vez más y más famosos. Cuando Ringo fue operado de las amígdalas ella lo visitó en el hospital reanudando así su noviazgo. Fue allí en el hospital donde Ringo le propuso matrimonio y ella aceptó. En diciembre, comenzaron a vivir juntos y en enero, Maureen descubrió que estaba embarazada de un mes.
A la edad de 18 años la noticia la dejó estupefacta. Cuando se lo dijo a Ringo, éste se lo tomó a la ligera pero como quería cuidar su imagen con los Beatles, insistió que se mantuviera en secreto hasta que anunciaran su boda. Richard Starkey Jr. y Mary Cox se casaron el 11 de febrero de 1965 en el Caxton Hall Registry Office en Londres a las 8:00 am. El padrino fue Brian Epstein y la recepción fue en la casa de Brian. Su primer hijo, Zak nació el 13 de septiembre de 1965, seguido de Jason el 19 de agosto de 1967, y Lee el 17 de noviembre de 1970. El matrimonio se llevó bien por un tiempo. Maureen siempre esperaba despierta a Ringo cuando éste se encontraba fuera trabajando en los estudios de grabación para hacerle su comida a la hora que fuera. Ringo era muy hogareño y disfrutaba de Maureen y los niños, pero pronto él se aburriría de todo y para cuando nació su hija Lee en 1970, el matrimonio ya estaba en problemas. Maureen fue una auténtica fan de Los Beatles. Fue ella quien bordó con lentejuelas los trajes del Sgt. Pepper, además de participar en el respaldo vocal de "The Continuing Story Of Bungalow Bill" y también fue la única esposa de un Beatle que asistió al concierto de la azotea en 1969. Cuando Los Beatles se separaron en 1970, también lo hizo el matrimonio Starkey. Las infidelidades de Ringo iban en aumento cada vez más y su alcoholismo se convirtió en un gran problema. Para poner las cosas peor, en 1972 cuando fueron de visita a la casa de George y Pattie Harrison, George confesó lo mucho que amaba a Maureen. Las malas lenguas dicen que este fue el inicio de la ruptura de los matrimonios Harrison y Starr. A pesar de todos los problemas que el matrimonio encaraba, Maureen no se quería divorciar.
Su esposo, sin embargo, persistía en que ambos deberían divorciarse. Maureen aceptó de mala manera. En julio de 1975 el divorcio se dio por sentado al descubrirse el affaire de Ringo con la modelo americana Nancy Andrews. A principios de los años 80, Maureen comenzó una relación con Isaac Tigrette, dueño de la famosa cadena de restaurantes Hard Rock Cafe. Hubo un intento de reconciliación entre Ringo y Maureen después de que Ringo terminó con Nancy Andrews, pero al final no pudo ser porque Ringo se había enamorado de su compañera en la película The Cavern, Barbara Bach, así que Maureen regresó a los brazos de Tigrett. En 1987, Maureen dio a luz a su hija Augusta y también le dio la bienvenida a su primera nieta gracias a su hijo Zak. El 27 de mayo de 1989, Maureen y Tigrett se casaron, decidiendo dividir su tiempo entre la ciudad de Los Ángeles en California y la ciudad de Boston. La nueva Sra. Tigrett dijo en una ocasión que le había tocado madurar inmediatamente después de su divorcio de Ringo Starr, acordando estar en paz consigo misma. Parecía que las cosas le irían muy bien a partir de entonces, pero lamentablemente no fue así. En la inauguración del House Of Blues, en California, Maureen Cox de repente se desmayó. Lo que al principio se diagnosticó como una leve anemia, pronto se convirtió en una forma de leucemia llamada Mylodisplasia. Fue inmediatamente internada en octubre de 1994 en el Fred Hutchinson Cancer Research Center, en Seattle WA. Allí los médicos hicieron todo lo que estaba a su alcance para salvarle la vida, pero perdió la batalla. El 30 de diciembre de 1994, Maureen Cox murió a la temprana edad de 47 años. Su esposo Isaac Tigrett, sus hijos Zak, Jason y Lee, su madre y su ex esposo Ringo Starr, quien logró decirle en ese momento lo mucho que la había amado, estaban alrededor de ella cuando falleció. Dan Akyrayd, el abuelo paterno de Augusta declararía más tarde en pocas palabras lo mucho que significó Maureen: "Maureen era una persona adorable, muchos la van a extrañar".
Inmortalizada en: la voz de Maureen puede oírse en la canción "The Continuing Story of Bungalow Bill" junto con las voces de Pattie Boyd y Yoko Ono, en el vídeo de Los Beatles "Something" y en las canciones de los Beatles: "Husband And Wives", "Crying", "Little Willow" y "Sometimes".
Después de bailar, Ringo le preguntó a Maureen si quería salir con él, ella estuvo de acuerdo pero le dijo que tenía que estar en casa a medianoche, como toda una cenicienta. Comenzaron a salir juntos regularmente y decidieron mantener su relación en secreto para evitar el enfado de las fans, pero de igual forma ellas lo descubrieron. Maureen siguió yendo al Cavern Club a ver las actuaciones de Los Beatles, pero cada vez se fue tornando más y más peligroso para ella ir a ese lugar. Así lo recordaba la propia Maureen, en 1967: "Las muchachas solían esperar alrededor del Cavern Club durante casi todo el día, sólo para conseguir poder verlos de cerca. Ellos solían tocar un rato en la sesión del mediodía, y luego las chicas se quedaban afuera toda la tarde haciendo cola para poder entrar nuevamente por la noche. Ringo y yo una vez pasamos por ahí cerca de la medianoche y ellas ya estaban haciendo cola para el día siguiente. El objetivo era lograr alcanzar las filas más próximas a la tarima y así poder ver a Los Beatles bien de cerca. Nunca hice cola hasta 2 ó 3 horas antes de que el club abriera. Me daba miedo. Las mujeres que estaban en la cola se peleaban entre sí. Cuando las puertas se abrían las que estaban primeras entraban como un rayo para evitar ser empujadas y pisoteadas por las que venían atrás. Entraban con los rulos puestos para ver a los primeros grupos, pero, cuando se acercaba la hora en la que saldrían Los Beatles, iban en grupos de 4 a los baños para cambiarse y arreglarse de pies a cabeza. Así que cuando Los Beatles salían a escena, las chicas lucían como si acabaran de llegar, obviamente se morían por que alguno se fijara en ellas y así conseguir conocer de cerca por lo menos a uno de ellos. Era realmente terrible la locura causada por ellos, los gritos y el estado de excitación que Los Beatles generaban era indescriptible".
Cierto día, cuando Maureen esperaba a Ringo dentro de su automóvil, una chica se le acercó y le preguntó si era la novia de Ringo. Maureen lo negó, pero aquella empezó a gritarle a que saliera del coche a pelear o de lo contrario le rompería la cara. Maureen inmediatamente subió la ventanilla, temiendo por su vida. La vida de Cox estuvo en riesgo una vez que las fans se enteraron de que estaba saliendo con Ringo. En una ocasión casi la matan y regularmente era golpeada por las muchachas. En septiembre de 1963 Ringo invitó a Maureen a unas vacaciones en Grecia junto a Paul McCartney y su novia Jane Asher durante tres semanas. Maureen se fue sin el permiso de sus padres, ya que tenía miedo de que estos no la dejaran ir, pero de todas formas se enteraron más tarde cuando leyeron en los tabloides británicos donde estaba su hija. El padre de Maureen, Joe Cox declaró en 1964: "Realmente no fue una sorpresa para mi esposa y para mí enterarnos de que ella estaba del otro lado del mundo. No había ninguna diferencia entre si le dábamos o no permiso porque ella se iba igual. Maureen era una muchacha muy sensible e independiente y se sabía cuidar por sí sola". Aunque no era muy querida por las fans, Cox respondía las cartas que recibía Ringo Starr, sobre todo las de sus admiradoras femeninas. Los familiares de las fans también escribían agradeciendo la gentileza que tenían al responder las cartas de sus hijas. Su noviazgo finalizaría por un tiempo en 1964, justo desde que Los Beatles comenzaron a hacerse cada vez más y más famosos. Cuando Ringo fue operado de las amígdalas ella lo visitó en el hospital reanudando así su noviazgo. Fue allí en el hospital donde Ringo le propuso matrimonio y ella aceptó. En diciembre, comenzaron a vivir juntos y en enero, Maureen descubrió que estaba embarazada de un mes.
A la edad de 18 años la noticia la dejó estupefacta. Cuando se lo dijo a Ringo, éste se lo tomó a la ligera pero como quería cuidar su imagen con los Beatles, insistió que se mantuviera en secreto hasta que anunciaran su boda. Richard Starkey Jr. y Mary Cox se casaron el 11 de febrero de 1965 en el Caxton Hall Registry Office en Londres a las 8:00 am. El padrino fue Brian Epstein y la recepción fue en la casa de Brian. Su primer hijo, Zak nació el 13 de septiembre de 1965, seguido de Jason el 19 de agosto de 1967, y Lee el 17 de noviembre de 1970. El matrimonio se llevó bien por un tiempo. Maureen siempre esperaba despierta a Ringo cuando éste se encontraba fuera trabajando en los estudios de grabación para hacerle su comida a la hora que fuera. Ringo era muy hogareño y disfrutaba de Maureen y los niños, pero pronto él se aburriría de todo y para cuando nació su hija Lee en 1970, el matrimonio ya estaba en problemas. Maureen fue una auténtica fan de Los Beatles. Fue ella quien bordó con lentejuelas los trajes del Sgt. Pepper, además de participar en el respaldo vocal de "The Continuing Story Of Bungalow Bill" y también fue la única esposa de un Beatle que asistió al concierto de la azotea en 1969. Cuando Los Beatles se separaron en 1970, también lo hizo el matrimonio Starkey. Las infidelidades de Ringo iban en aumento cada vez más y su alcoholismo se convirtió en un gran problema. Para poner las cosas peor, en 1972 cuando fueron de visita a la casa de George y Pattie Harrison, George confesó lo mucho que amaba a Maureen. Las malas lenguas dicen que este fue el inicio de la ruptura de los matrimonios Harrison y Starr. A pesar de todos los problemas que el matrimonio encaraba, Maureen no se quería divorciar.
Su esposo, sin embargo, persistía en que ambos deberían divorciarse. Maureen aceptó de mala manera. En julio de 1975 el divorcio se dio por sentado al descubrirse el affaire de Ringo con la modelo americana Nancy Andrews. A principios de los años 80, Maureen comenzó una relación con Isaac Tigrette, dueño de la famosa cadena de restaurantes Hard Rock Cafe. Hubo un intento de reconciliación entre Ringo y Maureen después de que Ringo terminó con Nancy Andrews, pero al final no pudo ser porque Ringo se había enamorado de su compañera en la película The Cavern, Barbara Bach, así que Maureen regresó a los brazos de Tigrett. En 1987, Maureen dio a luz a su hija Augusta y también le dio la bienvenida a su primera nieta gracias a su hijo Zak. El 27 de mayo de 1989, Maureen y Tigrett se casaron, decidiendo dividir su tiempo entre la ciudad de Los Ángeles en California y la ciudad de Boston. La nueva Sra. Tigrett dijo en una ocasión que le había tocado madurar inmediatamente después de su divorcio de Ringo Starr, acordando estar en paz consigo misma. Parecía que las cosas le irían muy bien a partir de entonces, pero lamentablemente no fue así. En la inauguración del House Of Blues, en California, Maureen Cox de repente se desmayó. Lo que al principio se diagnosticó como una leve anemia, pronto se convirtió en una forma de leucemia llamada Mylodisplasia. Fue inmediatamente internada en octubre de 1994 en el Fred Hutchinson Cancer Research Center, en Seattle WA. Allí los médicos hicieron todo lo que estaba a su alcance para salvarle la vida, pero perdió la batalla. El 30 de diciembre de 1994, Maureen Cox murió a la temprana edad de 47 años. Su esposo Isaac Tigrett, sus hijos Zak, Jason y Lee, su madre y su ex esposo Ringo Starr, quien logró decirle en ese momento lo mucho que la había amado, estaban alrededor de ella cuando falleció. Dan Akyrayd, el abuelo paterno de Augusta declararía más tarde en pocas palabras lo mucho que significó Maureen: "Maureen era una persona adorable, muchos la van a extrañar".
Inmortalizada en: la voz de Maureen puede oírse en la canción "The Continuing Story of Bungalow Bill" junto con las voces de Pattie Boyd y Yoko Ono, en el vídeo de Los Beatles "Something" y en las canciones de los Beatles: "Husband And Wives", "Crying", "Little Willow" y "Sometimes".