Marc Reign, batería del grupo Destruction, fue arrestado en el año 2004 en Italia cuando volvía con su grupo hacia su país natal después de un exitoso concierto en Brescia. En el control de aduanas del aeropuerto de Milán, parte del material que llevaban fue confundido con material peligroso. En concreto fueron unos cinturones de balas de cromo los que encendieron la alarma entre los encargados de aduanas sobre una posible amenaza de bomba. La banda no podía creer lo que estaba pasando e infructuosamente intentaron explicar que esos elementos eran simples accesorios para el show del grupo y que las balas no tenían pólvora dentro. Las cosas empeoraron cuando dijeron a las autoridades que "esos elementos son como una marca para reconocer a Destruction", lo cual fue malinterpretado y causó pánico entre los oficiales. Finalmente y después de interminables explicaciones y de confirmar de quienes se trataba, las autoridades decidieron liberar a Marc, pero todos los "elementos bélicos" fueron confiscados. Ya de vuelta en casa la banda se lo tomó todo como una anécdota más y contaron que en sus 20 años de vida era la segunda vez que les pasaba esto, la primera fue en Perú.