No se sabe si el siempre provocador Johnny Rotten, cantante de los Sex Pistols, tenía conocimiento del conflicto existente en Euskadi, una comunidad autónoma española que lleva pidiendo desde hace ya muchos años la independencia del país, cuando se le ocurrió gritar "¡Viva España!" sobre el escenario del Festival Azkena Rock, celebrado en esa comunidad en el año 2008. Pero lo que sí se sabe es que la respuesta del público ante tan desafortunada frase no se hizo esperar. Inmediatamente, un teléfono móvil le golpeó en la cabeza. Entonces muy enfadado llamó "cobardes" a los asistentes y pidió al propietario del móvil que subiera al escenario. Sin embargo, la sangre no llegó al río. Después de la reprimenda al público por parte del cantante, el concierto continuó sin más incidentes. Seguramente, la próxima vez que Johnny Rotten actúe en Euskadi, se piense dos veces lo que va a decir sobre el escenario. O tal vez no, ya que de todos es conocido que desde sus inicios con los Sex Pistols siempre ha hecho del escándalo y la provocación su seña de identidad.