En el año 2008, tras un concierto de Iron Maiden en Atenas, Grecia, una de las guitarras favoritas del guitarrista Adrian Smith desapareció misteriosamente del backstage. Concretamente se trataba de una guitarra de la marca Jackson firmada por el músico, con el número de serie 8467, de color blanco. En cuanto el instrumento fue echadado de menos, el grupo se apresuró a hacer a través de su página web un llamamiento a sus seguidores para que les ayudaran a encontrar la exclusiva guitarra y así evitar que fuera vendida, dando todo tipo de detalles del instrumento: "Será muy difícil deshacerse de esta guitarra, ya que es única en el mundo", afirmaban en la web la banda londinense. También ofrecían una chaqueta de la gira y una carta de agradecimiento manuscrita por el propio Adrian Smith como recompensa para quien les facilitara información útil sobre la localización de tan preciado objeto. Sin embargo, todos los esfuerzos realizados por el grupo fueron inútiles y la guitarra hoy en día sigue en paradero desconocido.
Fuente: Metal Underground