Evan Seinfeld, además de ser músico, tiene una importante carrera como actor y director de películas porno. Se casó en el año 2004 con la estrella del cine porno Tera Patrick, con la que actuó en siete películas bajo el nombre de Spyder Jonez, pero se separaron a finales del 2009. Así contaba el músico su experiencia en el mundo del porno a la revista Popular 1, cuando ambos todavía formaban una hermosa pareja: "He dirigido más de 70 películas porno y actuado en más de cien. Es muy divertido para mí. Se ha cumplido el mayor sueño que un hombre puede tener: estoy casado con la mujer más bonita del mundo, y por mi trabajo puedo acostarme con las mujeres más bellas que existen, pero Tera sabe que para mí ella es la nº 1, no existe otra como ella, y lo sabe. Cuando trabajo con otra mujer, sabemos que no hay nada más. Puede haber feeling, ser divertido... pero después cada uno a su casa. Soy un hombre de gustos sencillos y en realidad llevo una vida más simple de lo que la gente cree. A Tera y a mí no nos gusta ir a restaurantes, preferimos quedarnos en casa cocinando y viendo 'Padre de Familia' en la televisión. Tenemos un inmenso respeto el uno por el otro y siempre hablamos y nos contamos lo que hacemos y lo que pensamos.
Yo siempre he sido muy tradicional en materia de sexo, apenas pasaba de la postura del misionero. Ni siquiera cuando era adolescente. Todos los chicos andaban como locos detrás de las chicas, y yo pasaba bastante, no era mi principal preocupación. Cuando empecé en el porno yo ni sabía que había tantos tipos de géneros diferente: jovencitas, mujeres gordas follando con otras mujeres gordas, transexuales... todo eso era nuevo para mí, reamente hay algo para todos los gustos. Mucha gente tiene un concepto muy idealizado del porno, creen que todos somos unos pervertidos y eso no es cierto. Luego están los que creen que eso es una vergüenza y realmente los que deberían avergonzarse son ellos mismos, el sexo es algo natural entre las personas y no hay nada de malo en enseñarlo cuando esas personas que lo practican están de acuerdo. Me he encontrado con gente, no mucha, pero sí alguna que me critican por hacer lo que hago, gente políticamente correcta. Yo creo que los que tienen un problema sexual son ellos. Nadie les obliga a ver mis películas. En la vida hay que respetar lo que hacen los demás aunque no te guste, yo respeto la forma de ganarse la vida de todo el mundo, y no por ello tengo que estar de acuerdo, pero lo respeto. Yo gano más dinero con el porno que con mi grupo, así que el porno es mi verdadero trabajo. Es divertido sí, pero es un trabajo. Me resulta gracioso y chocante que alguien pague dinero por verme follar, ¡todavía no me lo creo!".
Yo siempre he sido muy tradicional en materia de sexo, apenas pasaba de la postura del misionero. Ni siquiera cuando era adolescente. Todos los chicos andaban como locos detrás de las chicas, y yo pasaba bastante, no era mi principal preocupación. Cuando empecé en el porno yo ni sabía que había tantos tipos de géneros diferente: jovencitas, mujeres gordas follando con otras mujeres gordas, transexuales... todo eso era nuevo para mí, reamente hay algo para todos los gustos. Mucha gente tiene un concepto muy idealizado del porno, creen que todos somos unos pervertidos y eso no es cierto. Luego están los que creen que eso es una vergüenza y realmente los que deberían avergonzarse son ellos mismos, el sexo es algo natural entre las personas y no hay nada de malo en enseñarlo cuando esas personas que lo practican están de acuerdo. Me he encontrado con gente, no mucha, pero sí alguna que me critican por hacer lo que hago, gente políticamente correcta. Yo creo que los que tienen un problema sexual son ellos. Nadie les obliga a ver mis películas. En la vida hay que respetar lo que hacen los demás aunque no te guste, yo respeto la forma de ganarse la vida de todo el mundo, y no por ello tengo que estar de acuerdo, pero lo respeto. Yo gano más dinero con el porno que con mi grupo, así que el porno es mi verdadero trabajo. Es divertido sí, pero es un trabajo. Me resulta gracioso y chocante que alguien pague dinero por verme follar, ¡todavía no me lo creo!".
Fuente: Popular 1.