En agosto de 2007, una joven de 21 años de edad fue arrestada y fichada por la policía tras haber atacado a un hombre que intentaba entonar una canción del grupo Coldplay en un Karaoke de Seattle, Estados Unidos. Testigos presenciales informaron que el hombre estaba cantando las primeras estrofas de la canción "Yellow", cuando la mujer perdió el control y, tras gritar: "¡Oh, no, esa canción no!, se abalanzó sobre él. La joven, de aspecto hippie, subió enfurecida al escenario gritando todo tipo de improperios, mientras afirmaba que tanto el cantante de Coldplay, Chris Martin, como su música eran "una mierda". Después empujó al hombre y comenzó a golpearle para conseguir que dejara de cantar. "Hicieron falta tres o cuatro personas para lograr contenerla", aseguró un camarero del bar. "La chica se puso como loca y no paraba de golpear a quien intentaba inmovilizarla, incluso llegó a pegar a un oficial de policía que se encontraba fuera de servicio en el local". Cuando los refuerzos policiales llegaron al lugar, la clienta fue detenida por agresión y llevada a la cárcel del condado de King. Tras las investigaciones oficiales, se llegó a la conclusión de que el alcohol no fue un factor determinante, ya que según declaró un camarero del local: "La mujer sólo ingirió un chupito de Jagermeister, una especie de licor de hierbas". Finalmente, se llegó a la conclusión de que el ataque tan sólo fue producto de la combinación de un intérprete de Karaoke sin talento, con el odio acérrimo que sentía la mujer hacia Coldplay. Lamentablemente, este incidente no ha sido un caso aislado en el que un mal intérprete provoca una situación violenta en un Karaoke. Según la ABC News, otros dos hombres fueron atacados en noviembre de 2008, después de interpretar una canción de heavy metal, por un hombre que estaba insatisfecho con sus habilidades para el canto. Y en Connecticut, otra mujer también fue atacada en otro Karaoke por un grupo de seis mujeres, a las que no les gustó su interpretación de la canción "A Dios le pido", del cantante colombiano Juanes.
Fuente: Seattlepi