En el año 2010, Ozzy Osbourne lanzó unos exclusivos paquetes VIP muy originales que incluían, entre otros objetos, una Ouija personalizada. Adornada con los siniestros colores del Infierno y con la firma de Ozzy, la Ouija hizo las delicias de los fans más oscuros y amantes de lo paranormal del Príncipe de la Tinieblas. Pero no todo el mundo pudo conseguir este objeto de coleccionista, ya que solo estuvo al alcance de unos pocos privilegiados que compraron los paquetes VIP para asistir a los conciertos que Ozzy ofreció durante la gira 2010-2011 por Estados Unidos. Los paquetes también incluían, además de la entrada de rigor con su correspondiente asiento Premium en las primeras filas y varios productos de merchandising, un Meet & Greet con Ozzy y una invitación para la fiesta previa al concierto.