May Booker era una anciana de 70 años cuando en 1982 escribió una carta a la BBC contándoles que sería la mujer más feliz del mundo, si pudiera tocar el teclado con Thin Lizzy, su grupo favorito, antes de morir. Su relato emocionó tanto a los directivos de esta cadena de televisión que inmediatamente se pusieron en contacto con Phil Lynott para hacerle saber el extraordinario caso de la anciana. Y entre todos organizaron un encuentro en el programa Jim’ll Fix It, de Jimmy Savile, donde May por fin pudo conocer a todos los miembros de la banda y posteriormente, tocar con ellos.