El 16 de octubre de 2018, poco después de que Elizabeth Herbert denunciara la desaparición de su marido, el cuerpo sin vida de Oliver Herbert, guitarrista y fundador del grupo All That Remainsel, apareció boca abajo en la orilla de Hydeville Pond, un pequeño estanque cercano a la casa del matrimonio, en Stafford Springs, Connecticut. Aparentemente, había muerto ahogado, en muy pocos centímetros de agua, a los 44 años de edad. Su muerte fue calificada por el forense como "indeterminada", al no haber pruebas que indicaran un suicidio, un accidente o un asesinato. Tras la autopsia, la policía consideró la muerte sospechosa e inició una investigación para aclarar los hechos. Al parecer, el guitarrista había hecho un nuevo testamento y un seguro de vida a favor de su mujer solo una semana antes del trágico suceso, lo que colocó a Elizabeth en el objetivo principal de las investigaciones. Sin embargo, a día de hoy los hechos que ocasionaron la muerte de este talentoso guitarrista siguen siendo todo un misterio.