James Honeyman-Scott, guitarrista y miembro fundador del grupo The Pretenders, falleció prematuramente el 16 de junio de 1982. Su cuerpo sin vida fue encontrado en el apartamento de su novia en el distrito de Notting Hill, en el oeste de Londres. Curiosamente, dos días antes de su muerte, el grupo había despedido a Pete Farndon, el bajista de la banda, por sus problemas con las drogas. La autopsia revelaría que James falleció mientras dormía, por una insuficiencia cardíaca provocada por una sobredosis de cocaína, unas pocas horas después de haber dado un concierto benéfico en un club de Londres. Tenía solo 25 años de edad. Sus restos mortales se encuentran enterrados en el cementerio de la iglesia St. Peter's Churchyard de Pipe and Lyde, en Hertfordshire, Inglaterra.