Estrenamos una nueva sección, a la que hemos llamado Hall of Fame (El Salón de la Fama), en la que iremos subiendo las fotografías de todos los lectores que hayan comprado el libro del Anecdotario del Rock y quieran aparecer en ella. Hoy la inauguramos con la primera persona que adquirió el libro a través de Bubok. En su caso, por ser el primero en enviarnos una fotografía y darnos la idea de hacer esta sección, decidimos hacerle una pequeña entrevista. Se trata de un joven muy simpático que, además de seguir el blog desde hace varios años, es un gran melómano. Su nombre es Rafael Vera Peinado, y reside en Jaén, España:
—Hola, Rafael. ¿Nos cuentas algo sobre ti? ¿Cómo te ganas la vida?
—Tengo una tienda de informática en Alcalá la Real, BEEP, donde trabajo desde el 2002. Me dedico a tareas comerciales, de reparación... Soy la limpiadora, el gerente, el chico de los recados, el jefe, el empleado... es decir, autónomo, en resumen.
—¿Cuándo empezó a ser la música una parte importante en tu vida?
—La música siempre ha estado muy presente en mi casa. Desde la copla y el flamenco de mis padres, hasta el pop-rock de mis hermanas. Así que desde niño he escuchado música de todo tipo. Al heavy metal me aficioné cuando comencé a salir con los amiguetes y a intercambiar cintas con ellos, a los 12 ó 13 años.
—¿Cuáles son tus grupos favoritos?
—Supongo que por pillarme en la época más rockera, a los Guns N’ Roses les tengo mucho cariño, siempre y cuando no se salgan del "Use Your Illusion" ;-). Muy diferente es uno de mis cantantes favoritos, Javier Krahe. No tienen nada que ver, pero ahí está la gracia.
—¿Qué tipo de música suena en tu casa?
—En casa escuchamos de todo. Mi mujer tal vez es más de cantautores y música "tranquila" en general. Mi hija suele pasarme lo último que va saliendo en hip-hop. En la tienda casi siempre pongo Radio 3, así que indie, pop, rock... Además, muchos de mis colegas tienen grupos y no dejan de enseñarme estilos y grupos nuevos todos los días, aparte de los suyos. Como ves, no le hacemos ascos a nada.
—¿Es incompatible el rock y el heavy metal con cualquier otro tipo de música?
Creo que es más bien al contrario. Un "popero" se cierra en banda cuando le sugieres escuchar otra clase de música. Los rockeros y los heavys están (o suelen estar) mucho más abiertos a cosas nuevas, entre otras cosas, porque son una familia muy amplia.
—¿Tocas algún instrumento musical?
—Como casi todo el mundo, toco (o intento tocar) la guitarra. Tengo, de hecho, dos en casa: una tipo Stratocaster y otra acústica. Intenté iniciarme en el bajo pero terminé vendiéndolo, se me daba incluso peor que la guitarra. Ahora prefiero no mancillar la música y dedicarme sólo a escucharla.
—¿Hay algún concierto del que guardes un especial recuerdo?
—Aunque no tiene nada que ver con el rock, creo que el concierto más curioso al que he asistido fue uno de Paco Ibáñez, en el teatro Isabel la Católica de Granada. Entre la marabunta de gente había desde veinteañeros con rastas hasta respetables cincuentones trajeados. Cuando salimos a la calle a fumar durante el descanso, todos acabamos charlando como si fuéramos viejos colegas.
—¿Coleccionas algún tipo de objeto relacionado con el rock?
—Lo único que he coleccionado han sido ordenadores de 8 y 16 bits (los antiguos MSX y Amastrad). De grupos de rock sólo tengo una camiseta de Los Ramones, que me compré en la "crisis de los 30".
—¿Cómo conociste nuestro blog?
—Sería por el 2008 ó 2009, cuando comencé a meterme de lleno en el mundo de Twitter. A través de algún seguidor llegué a vuestro blog. Desde entonces lo consulto regularmente y paso las horas muertas saltando de una anécdota a otra.
—¿Cuáles son tus historias favoritas de la trastienda del rock?
—Para mí las más curiosas son las que tratan sobre las "borricadas" de los famosos. Los que llegan al hotel y exigen máquinas de pinball, o que no haya lacasitos de tal color... Se ve que volverse estrella implica buscarse una excentricidad como "marca de la casa".
—¿Cuál ha sido la que más te ha impactado?
—Sin duda fue "La triste agonía de Freddie Mercury", casi acabo llorando. Se la pasé a mi mujer para que también la leyera, y ella, con un nudo en el estómago, a duras penas pudo terminar de leerla.
—Si pudieras elegir ser una estrella del rock, ¿quién te hubiera gustado ser?
—Uf, soy demasiado normal. Quizá por cercanía geográfica y porque tampoco es una estrella demasiado endiosada, me gustaría ser el Sabina. ¡¡A golfear y crapulear hasta las tantas!!
—¿Qué tal ha sido la experiencia de comprar a través de Bubok? ¿Se lo recomendarías a la gente?
—Me quedé más que sorprendido cuando me dejaron el paquete. No esperaba el libro hasta casi una semana después de haberlo comprado y en apenas 3 días lo tenía en el mostrador. ¡¡Más rápido que mis proveedores!!
—Ya sé que no te ha dado tiempo a leerlo, pero a simple vista qué te ha parecido el libro.
—Solo deciros que esa portada pide a gritos que la saquéis en camiseta. La edición impresa está estupenda, pero creo que es más cómoda la digital para seguir de un tirón las anécdotas por grupos. En la impresa no puedes "reordenarla" a tu gusto.
—Y por último, ¿por qué te gusta tanto el Anecdotario del Rock?
—Una de las razones por las que me encanta leeros es por ver a las estrellas del rock como lo que realmente son: personas normales y corrientes, con sus errores y sus faltas.
—Muchas gracias, Rafael, por contestar a nuestras preguntas.
—De nada, ha sido un placer.
—Hola, Rafael. ¿Nos cuentas algo sobre ti? ¿Cómo te ganas la vida?
—Tengo una tienda de informática en Alcalá la Real, BEEP, donde trabajo desde el 2002. Me dedico a tareas comerciales, de reparación... Soy la limpiadora, el gerente, el chico de los recados, el jefe, el empleado... es decir, autónomo, en resumen.
—¿Cuándo empezó a ser la música una parte importante en tu vida?
—La música siempre ha estado muy presente en mi casa. Desde la copla y el flamenco de mis padres, hasta el pop-rock de mis hermanas. Así que desde niño he escuchado música de todo tipo. Al heavy metal me aficioné cuando comencé a salir con los amiguetes y a intercambiar cintas con ellos, a los 12 ó 13 años.
—¿Cuáles son tus grupos favoritos?
—Supongo que por pillarme en la época más rockera, a los Guns N’ Roses les tengo mucho cariño, siempre y cuando no se salgan del "Use Your Illusion" ;-). Muy diferente es uno de mis cantantes favoritos, Javier Krahe. No tienen nada que ver, pero ahí está la gracia.
—¿Qué tipo de música suena en tu casa?
—En casa escuchamos de todo. Mi mujer tal vez es más de cantautores y música "tranquila" en general. Mi hija suele pasarme lo último que va saliendo en hip-hop. En la tienda casi siempre pongo Radio 3, así que indie, pop, rock... Además, muchos de mis colegas tienen grupos y no dejan de enseñarme estilos y grupos nuevos todos los días, aparte de los suyos. Como ves, no le hacemos ascos a nada.
—¿Es incompatible el rock y el heavy metal con cualquier otro tipo de música?
Creo que es más bien al contrario. Un "popero" se cierra en banda cuando le sugieres escuchar otra clase de música. Los rockeros y los heavys están (o suelen estar) mucho más abiertos a cosas nuevas, entre otras cosas, porque son una familia muy amplia.
—¿Tocas algún instrumento musical?
—Como casi todo el mundo, toco (o intento tocar) la guitarra. Tengo, de hecho, dos en casa: una tipo Stratocaster y otra acústica. Intenté iniciarme en el bajo pero terminé vendiéndolo, se me daba incluso peor que la guitarra. Ahora prefiero no mancillar la música y dedicarme sólo a escucharla.
—¿Hay algún concierto del que guardes un especial recuerdo?
—Aunque no tiene nada que ver con el rock, creo que el concierto más curioso al que he asistido fue uno de Paco Ibáñez, en el teatro Isabel la Católica de Granada. Entre la marabunta de gente había desde veinteañeros con rastas hasta respetables cincuentones trajeados. Cuando salimos a la calle a fumar durante el descanso, todos acabamos charlando como si fuéramos viejos colegas.
—¿Coleccionas algún tipo de objeto relacionado con el rock?
—Lo único que he coleccionado han sido ordenadores de 8 y 16 bits (los antiguos MSX y Amastrad). De grupos de rock sólo tengo una camiseta de Los Ramones, que me compré en la "crisis de los 30".
—¿Cómo conociste nuestro blog?
—Sería por el 2008 ó 2009, cuando comencé a meterme de lleno en el mundo de Twitter. A través de algún seguidor llegué a vuestro blog. Desde entonces lo consulto regularmente y paso las horas muertas saltando de una anécdota a otra.
—¿Cuáles son tus historias favoritas de la trastienda del rock?
—Para mí las más curiosas son las que tratan sobre las "borricadas" de los famosos. Los que llegan al hotel y exigen máquinas de pinball, o que no haya lacasitos de tal color... Se ve que volverse estrella implica buscarse una excentricidad como "marca de la casa".
—¿Cuál ha sido la que más te ha impactado?
—Sin duda fue "La triste agonía de Freddie Mercury", casi acabo llorando. Se la pasé a mi mujer para que también la leyera, y ella, con un nudo en el estómago, a duras penas pudo terminar de leerla.
—Si pudieras elegir ser una estrella del rock, ¿quién te hubiera gustado ser?
—Uf, soy demasiado normal. Quizá por cercanía geográfica y porque tampoco es una estrella demasiado endiosada, me gustaría ser el Sabina. ¡¡A golfear y crapulear hasta las tantas!!
—¿Qué tal ha sido la experiencia de comprar a través de Bubok? ¿Se lo recomendarías a la gente?
—Me quedé más que sorprendido cuando me dejaron el paquete. No esperaba el libro hasta casi una semana después de haberlo comprado y en apenas 3 días lo tenía en el mostrador. ¡¡Más rápido que mis proveedores!!
—Ya sé que no te ha dado tiempo a leerlo, pero a simple vista qué te ha parecido el libro.
—Solo deciros que esa portada pide a gritos que la saquéis en camiseta. La edición impresa está estupenda, pero creo que es más cómoda la digital para seguir de un tirón las anécdotas por grupos. En la impresa no puedes "reordenarla" a tu gusto.
—Y por último, ¿por qué te gusta tanto el Anecdotario del Rock?
—Una de las razones por las que me encanta leeros es por ver a las estrellas del rock como lo que realmente son: personas normales y corrientes, con sus errores y sus faltas.
—Muchas gracias, Rafael, por contestar a nuestras preguntas.
—De nada, ha sido un placer.
Si tú también quieres aparecer en esta sección, sólo tienes que enviarnos un correo electrónico con una fotografía en la que se te vea sujetando nuestro libro a: anecdotariodelrock@yahoo.com y podrás entrar a formar parte de nuestro Salón de la Fama.