En 1992, Bard G. "Faust" Eithun, batería del grupo de black metal Emperor, fue condenado a 14 años de prisión por asesinar brutalmente a Magne Andreassen, un hombre que se le insinuó mientras estaba dando un paseo, el 21 de agosto de ese mismo año. Durante el juicio, Faust explicó que le asestó 37 puñaladas y le reventó la cabeza a patadas, antes de abandonar su cuerpo en un bosque cercano al Estadio Olímpico de Lillehammer, en Noruega: "Ese hombre se me acercó. Estaba ebrio y obviamente era maricón porque quería tener algún tipo de contacto conmigo. Me invitó a ir al bosque, así que estuve de acuerdo. Ya entonces había decidido que quería matarlo, lo cual es muy raro porque yo no soy así. Me volví loco y lo apuñalé una y otra vez. Cuando estuvo en el suelo con los ojos cerrados, le di varias patadas en la cabeza para asegúrame de que realmente estaba muerto”.