En una ocasión Lemmy Kilmister dijo que el LSD lo había hecho mejor persona y más solidario porque era la única droga que le hizo ver la importancia de tratar a los demás con respeto. Pero para llegar a ese punto tuvo que hacer frente a un mal viaje, que él mismo contaba de esta manera en el diario The Guardian: “Solo he tenido un mal viaje. Una vez vi a las personas como animales, las vi como ratas y perros. Y grandes anillos alrededor de mis ojos. Hagas lo que hagas, si alguna vez te pasa, no te mires al espejo. Toda la carne de tu cara se derrite. Y estarás enfermo para siempre”. Y es que durante el tiempo en el que fue roadie de Jimi Hendrix, Lemmy consumió grandes cantidades de LSD, que el propio Hendrix transportaba en su maleta porque en aquellos días esta droga no era ilegal. Incluso en una ocasión el legendario guitarrista compartió con él 100.000 tabletas de LSD que había traído de Estados Unidos.