En 1977 Sid Vicious conoció a Nancy Spungen, una problemática chica de Philadelphia, ardiente fan de los Sex Pistols. Nancy ejercía la prostitución en Londres. Su tormentosa relación daría paso a un reguero de drogas, escándalos y violencia. En 1978, en plena gira americana, Sid y Nancy alquilaron la habitación nº 100 del Hotel Chelsea de New York. El 12 de octubre, y atendiendo a una llamada que hablaba de una fuerte disputa en la habitación de Sid, la policía halló el cadáver ensangrentado de Nancy. Supuestamente, el bajista la había apuñalado con un cuchillo de 13 centímetros. Diez días después, Sid intentaba suicidarse cortándose las venas y gritando que quería estar con Nancy. Fue internado en un hospital psiquiátrico para rehabilitarse de su drogadicción. Después de salir del hospital, el 2 de febrero de 1979, su madre lo halló muerto en el apartamento de Michelle Robinson, la nueva novia de Sid. Jamás se supo si fue un accidente o un suicidio pero entre sus ropas hallaron un poema titulado "Nancy" en el cual mencionaba que no podía vivir sin ella. Unas noches más tarde, su madre escaló el cementerio de Philadelphia donde se hallaba enterrada Nancy, y contrariamente a los deseos de la familia Spungen, arrojó las cenizas de Sid sobre la tumba.

La casa donde mirió Sid Vicious